El hidrógeno como combustible en el comercio internacional, es una promesa que para muchas empresas sostienen es la alternativa para sustituir el gas natural, y que no emite gases de efecto invernadero en su combustión. Recientemente participaron expertos en la materia en la Cumbre del World Hydrogen Latin America, para discutir sobre la inclusión del hidrógeno en el comercio de América Latina, el Caribe y México.

El punto más importante son los costos y la infraestructura para su producción, pues no se encuentra de manera aislada en la naturaleza, sino que se genera a partir de otras sustancias que lo contienen, entre ellos el agua, el carbón y el gas natural. La forma ideal de producirlo sería obtenerlo directamente del agua –una sustancia presente en el 70% del planeta, para lo cual sería necesario llevar a cabo un proceso denominado electrolisis, que consiste en la descomposición de las moléculas de agua (H2O), en oxígeno (O2) e hidrógeno (H2).

Entre los participantes de la Cumbre se encontró Alexis Rodríguez, Regional Head of Energy Transition Maersk, quién indica que se tiene que considerar no solo lugares estratégicos para su construcción, sino también que éstos tengan la capacidad de sostener el poder calorífico de este combustible. Indicó además que la empresa cuenta con un proyecto con el fin de reducir la huella de carbono en el transporte marítimo, terrestre y aéreo.